Todos sabemos que el lenguaje castellano es amplio, rico y diverso, como la gente que pasa por "El Diario de Patricia". En una entrada anterior hablé brevemente de algunas de las expresiones que mi familia materna ha utilizado de toda la vida y que son, por así decirlo, francamente peculiares y/o llamativas. Comenté que tenía que pedir permiso a una persona para hablar de sus "palabros", ya que estos rozan la demencia en la forma en la que un niño nombra a las cosas que le rodean.
Esta persona en cuestión, llamémosle "R", es la hermana de mi novia (me comentó en la reunión privada mantenida con ella, en un lugar neutral entre Navarra y La Rioja, que no desvelara su total identidad). Esta chiquilla, hoy convertida en toda una mujer de su tiempo, hecha a si misma, coleccionó una serie de nombres y denominaciones de lo más variado y peculiar. Su hermana Ester, hoy en día mi actual pareja y presa preferida del gato, también ayudó lo suyo en ampliar este documento al que hoy vamos a mencionar.
Luego dicen que Tolkien fue un tío muy espabilado porque creó un mundo imaginario y un lenguaje de lo más interesante y tal y cual. Perfecto. Pues aquí mi cuñada, con 3 o 4 años, inventó palabras como NOANA (con su diminutivo NOANITA), TIMACOS, PECHÉN, CALACA, GUDÓN, INVIDAL, CAPITILLO, CALZOTILLO o CALCINILLO.
Algunos de estos términos pueden recordar a la palabra a la cual se refiere, pero de una manera muy peregrina. Tal es el caso de GUDÓN, que hace referencia al ALGODÓN. Incluso decir que estás CALACA si tienes mucho calor, haciendo mención a que estás CALADA por haber sudado mucho podría no resultar del todo extraño. A esta jovenzuela le daba a veces por cambiar la terminación de las palabras y diminutivizarlas (me acabo de inventar esta palabra???), haciendo que una se pareciera a la que no es. Por ejemplo, un CALZOTILLO era un CALZONCILLO y unos CALCINILLOS eran unos CALCETINES, resultando que a la inversa podrían tener más relación.
A su corta edad ya era capaz de distinguir lo singular de lo plural, así como lo individual de lo colectivo. Por ello, en un bucólico paraje de la riojana Sierra de los Cameros descubrió, nadando placidamente en un remanso del río Iregua, un pez INVIDAL, o lo que es lo mismo, un único pez, el solito consigo mismo, vamos, una trucheja INDIVIDUAL.
Palabras mayores son decir -"Mamá, NOANA (o NOANITA)" cuando quería hacer pis en un ORINAL. Su abuelo las pasó canutas cuando en las fiestas del pueblo se ponía a llorar desconsoladamente gritando a los cuatro vientos que quería unos TIMACOS, y el pobre hombre sin darse cuenta que tenía delante de los ojos el ansiado objeto de deseo de la nieta, unos PRISMÁTICOS.
Una vecina no pudo complacerla con la merienda porque no pudo llegar a entender que la niña quería un CAPITILLO, lo que traducido al lenguaje castellano es un BOCADILLO.
Y lo más peregrino de todo, el sumun de lo rebuscado, más incierto que el origen del euskera incluso (que dicen que se inventó en la Rioja, toma castaña!!) es la palabra PECHÉN. Si a mi me lo dicen, podría llegar a imaginarme que la niña domina varios idiomas y hace referencia a un melocotón (en el pueblo los cultivan bien ricos), por lo de "peach" en inglés o "pêche" en francés. Pero no. PECHÉN era la BICICLETA. No me preguntéis de donde carajo viene esto, porque estoy por escribir un ensayo acerca de este tema...
Por último, especial mención a la gastronomía en "Casa de Comidas Angelines", donde si te ponen CUERPILLOS prepárate a comer CODORNICES (el parecido viene por el aspecto de las codornices ya peladitas, que tienen como un cuerpín pseudo-humano). Los filetes de lomo adobado son aquellos "FILETES DE COSITA ROJA" (por el borde rojizo que queda del adobado con pimentón). Un simple, maravilloso y delicioso revuelto de huevo con cebolla se convierte en "DE LO AMARILLO" (esto fue cosa de Ester que le dijo a su madre que cuando iban a comer "de lo amarillo. Me imagino a la pobre mujer pensando si con amarillo se refería a limones, piña en almíbar, un plátano, paella o vete tu a saber que). Para rematar la faena, llegaría la PERDICIÓN, sin incurrir en pecados o vicios. La PERDICIÓN es un guiso de lomo con pimientos en su versión más básica (muy popular en Navarra). Para Ester era lo más de lo más, no había cosa comparable, haría locuras por comerlo...esa fue y sigue siendo su PERDICIÓN.
No quiero terminar esto sin comentar algo que se me olvidó el otro día, ya que fui yo el protagonista. Era yo bastante pequeño (no recuerdo la edad), y se me escapo delante de mi madre un sonoro "JODER". Mi madre me recriminó el haber dicho eso y yo, todo inocente y tratando de escapar del cachete por malhablado, afirme que yo no había dicho JODER, sino "JONÉ". Mi madre, contraatacando para pillarme, me preguntó que de donde me he sacado eso de "JONÉ" y yo, pensando todo lo rápido que mi infantil cabecita me permitía, me quedé tan ancho diciendo que "JONÉ" era ni más ni menos que...."CASTAÑAS JONETAS". Ahí queda eso...
(Gracias a "R" por permitirme hacer este "revival" a su más tierna infancia. Molas mazo!!)
Esta persona en cuestión, llamémosle "R", es la hermana de mi novia (me comentó en la reunión privada mantenida con ella, en un lugar neutral entre Navarra y La Rioja, que no desvelara su total identidad). Esta chiquilla, hoy convertida en toda una mujer de su tiempo, hecha a si misma, coleccionó una serie de nombres y denominaciones de lo más variado y peculiar. Su hermana Ester, hoy en día mi actual pareja y presa preferida del gato, también ayudó lo suyo en ampliar este documento al que hoy vamos a mencionar.
Luego dicen que Tolkien fue un tío muy espabilado porque creó un mundo imaginario y un lenguaje de lo más interesante y tal y cual. Perfecto. Pues aquí mi cuñada, con 3 o 4 años, inventó palabras como NOANA (con su diminutivo NOANITA), TIMACOS, PECHÉN, CALACA, GUDÓN, INVIDAL, CAPITILLO, CALZOTILLO o CALCINILLO.
Algunos de estos términos pueden recordar a la palabra a la cual se refiere, pero de una manera muy peregrina. Tal es el caso de GUDÓN, que hace referencia al ALGODÓN. Incluso decir que estás CALACA si tienes mucho calor, haciendo mención a que estás CALADA por haber sudado mucho podría no resultar del todo extraño. A esta jovenzuela le daba a veces por cambiar la terminación de las palabras y diminutivizarlas (me acabo de inventar esta palabra???), haciendo que una se pareciera a la que no es. Por ejemplo, un CALZOTILLO era un CALZONCILLO y unos CALCINILLOS eran unos CALCETINES, resultando que a la inversa podrían tener más relación.
A su corta edad ya era capaz de distinguir lo singular de lo plural, así como lo individual de lo colectivo. Por ello, en un bucólico paraje de la riojana Sierra de los Cameros descubrió, nadando placidamente en un remanso del río Iregua, un pez INVIDAL, o lo que es lo mismo, un único pez, el solito consigo mismo, vamos, una trucheja INDIVIDUAL.
Palabras mayores son decir -"Mamá, NOANA (o NOANITA)" cuando quería hacer pis en un ORINAL. Su abuelo las pasó canutas cuando en las fiestas del pueblo se ponía a llorar desconsoladamente gritando a los cuatro vientos que quería unos TIMACOS, y el pobre hombre sin darse cuenta que tenía delante de los ojos el ansiado objeto de deseo de la nieta, unos PRISMÁTICOS.
Una vecina no pudo complacerla con la merienda porque no pudo llegar a entender que la niña quería un CAPITILLO, lo que traducido al lenguaje castellano es un BOCADILLO.
Y lo más peregrino de todo, el sumun de lo rebuscado, más incierto que el origen del euskera incluso (que dicen que se inventó en la Rioja, toma castaña!!) es la palabra PECHÉN. Si a mi me lo dicen, podría llegar a imaginarme que la niña domina varios idiomas y hace referencia a un melocotón (en el pueblo los cultivan bien ricos), por lo de "peach" en inglés o "pêche" en francés. Pero no. PECHÉN era la BICICLETA. No me preguntéis de donde carajo viene esto, porque estoy por escribir un ensayo acerca de este tema...
Por último, especial mención a la gastronomía en "Casa de Comidas Angelines", donde si te ponen CUERPILLOS prepárate a comer CODORNICES (el parecido viene por el aspecto de las codornices ya peladitas, que tienen como un cuerpín pseudo-humano). Los filetes de lomo adobado son aquellos "FILETES DE COSITA ROJA" (por el borde rojizo que queda del adobado con pimentón). Un simple, maravilloso y delicioso revuelto de huevo con cebolla se convierte en "DE LO AMARILLO" (esto fue cosa de Ester que le dijo a su madre que cuando iban a comer "de lo amarillo. Me imagino a la pobre mujer pensando si con amarillo se refería a limones, piña en almíbar, un plátano, paella o vete tu a saber que). Para rematar la faena, llegaría la PERDICIÓN, sin incurrir en pecados o vicios. La PERDICIÓN es un guiso de lomo con pimientos en su versión más básica (muy popular en Navarra). Para Ester era lo más de lo más, no había cosa comparable, haría locuras por comerlo...esa fue y sigue siendo su PERDICIÓN.
No quiero terminar esto sin comentar algo que se me olvidó el otro día, ya que fui yo el protagonista. Era yo bastante pequeño (no recuerdo la edad), y se me escapo delante de mi madre un sonoro "JODER". Mi madre me recriminó el haber dicho eso y yo, todo inocente y tratando de escapar del cachete por malhablado, afirme que yo no había dicho JODER, sino "JONÉ". Mi madre, contraatacando para pillarme, me preguntó que de donde me he sacado eso de "JONÉ" y yo, pensando todo lo rápido que mi infantil cabecita me permitía, me quedé tan ancho diciendo que "JONÉ" era ni más ni menos que...."CASTAÑAS JONETAS". Ahí queda eso...
(Gracias a "R" por permitirme hacer este "revival" a su más tierna infancia. Molas mazo!!)
Jajaja....me encanta. Deberíamos hacer un diccionario de palabros. Sería la caña.
ResponderEliminarEn mi pueblo son capaces de decir...." voy a hacerme un nalís al hospital providencial" o ya en casos avanzados .." está nublo pero hace basca". ¿Cómo te has quedado?. Aunque, claro está, a veces son más fruto de traducir a pedal (valenciano-castellano) que otra cosa.
;D
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarajaja, adorable!!! Gracias a R por existir y a Ester por ayudarte a complementar esto. Si alguna vez tengo hijos me encataría que me dijeran que quieren comer de lo amarillo o filetes de cosita roja. Los niños son adorables.
ResponderEliminarGracias Alber por este post que me ha hecho reir un montón. Empecé con una sonrisita y al final incluso reí. Además de que las palabras son muy graciosas es muy original la forma en que lo cuentas.
Yo lo más "raro" que recuerdo es a mi hermano llamándole "tolocotol" a un helicoptero!!!!
Un beso
Una prima mía, un menos de un año mayor que yo, cuando eramos pequeñitas y me acercaban a su cuna se ponía a gritar: "Moca en mi cula nooooo".
ResponderEliminarAún ahora cuando nos vemos me lo recuerda!!!.
Besossssssssss
Jajajaja, qué bueno!! En mi familia tb tenemos un montón de palabros... daría para una enciclopedia!
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